El Atlético de Madrid volvió a pinchar fuera de casa en liga, tras caer por 4-3 frente al Girona en Montilivi. Lo que pudo ser un golpe sobre la mesa y un inicio de año ilusionante, terminó de forma trágica para los colchoneros. Iván Martín en el último minuto logró armar un disparo desde dentro del área que se coló por la escuadra de la portería defendida por Oblak. Un duro castigo para un equipo colchonero que hizo méritos para al menos empatar en el estadio del segundo clasificado. Ahora, el Atlético dice adiós a La Liga por culpa de los partidos fuera de casa.
Tras la derrota de ayer, el Atlético acumula cuatro tropiezos consecutivos a domicilio en la presente edición de la Liga (Las Palmas, Barcelona, Athletic Club y Girona). Un dato que es noticia. La última vez que sucedió algo similar fue con Gregorio Manzano al cargo del equipo, es decir, en la era previa al legado de Simeone. Además, es la primera ocasión que el técnico rojiblanco pierde el primer partido del año, algo que no le sucedía al club desde 2009. Una de las claves parece estar en la falta de equilibrio entre el ataque y la defensa. Las buenas cifras de Morata y Griezmann, que llevan 23 tantos entre ambos, contrastan con un frágil bagaje defensivo. El conjunto rojiblanco ha encajado 23 goles en lo que llevamos de campeonato, los cuáles 12 han sido fuera de casa.
El último triunfo del Atlético en la competición doméstica fuera de casa data del 21 de octubre. Fecha en la que los rojiblancos se impusieron al Celta por 0-3 en Balaídos con un estelar Antoine Griezmann, que protagonizó un hat-trick. Esta, junto al triunfo en el Sadar frente a Osasuna por 0-2 y la contundente victoria por 0-7 al Rayo en Vallecas, han sido las únicas victorias del equipo en los nueve duelos disputados como visitante. Un pobre balance que contrasta con la gran versión del Atlético como local, donde tan solo el Getafe ha logrado arañarle un empate en los diez partidos jugados.
La derrota en Montilivi, no obstante, nos dejó alguna que otra buena noticia. Una de ellas es el hat-trick de Álvaro Morata, que está ante su mejor registro goleador desde que es parte de la entidad rojiblanca y probablemente de su carrera. Otra es el gran nivel ofrecido por Rodrigo De Paul. El mediocentro argentino lideró la sala de máquinas y asistió por partida doble al delantero madrileño. Fueron los dos hombres protagonistas en un equipo que, a diferencia de otras fechas, tuvo muy buenos pasajes de fútbol, demostró tener capacidad de reacción e imprimió por momentos intensidad al juego. Aunque no fue suficiente. Los partidos duran 90 minutos, y ahí el Girona mostró más solidez y acierto.
El próximo partido a domicilio del Atlético en La Liga será contra el Granada en Los Cármenes, el sábado 20 de enero. Una oportunidad para poner fin a esta mala racha y comenzar la segunda vuelta del campeonato de la mejor forma. Pero antes, los madrileños tiene compromiso de dieciseisavos de Copa en Lugo y la Supercopa de España. Dos competiciones que generan mucha ilusión en la afición y en las que el equipo deberá estar al 100% si pretende superar el envite.