Los profetas de la muerte del Cholismo y los vendedores de piel de gamusino deben volver a su cueva. Resulta que el Atleti ha vuelto a jugar bien tal como los burros hacen el amor, no por bello sino por tozudo. Esa insistencia en la idea de Simeone ha vuelto ha llevar al equipo a marcar y a jugar bien. Aquellos que decían que el entrenador argentino ya se había ido resulta que ahora le alabarán. Primero hay que creer, y después trabajar. De primero de Cholismo.
Tampoco es un momento para ponerse eufóricos. Sólo han sido 45 minutos de buen juego. La primera parte, salvo los primeros 15 minutos fueron de dominio absoluto vigués. El equipo estaba espeso, cometiendo muchas imprecisiones, fallando pases fáciles. Nadie estaba destacando, nadie parecía en su mejor versión, ni siquiera Filipe. El Celta tuvo dos ocasiones claras para adelantarse en el encuentro. La falta de acierto tuvo su castigo después.
Fue en la segunda parte cuando se desató el vendaval Griezmann. Fue entonces también cuando despertaron el resto de compañeros. ¿Casualidad? permítanme que lo dude. El francés, cuando está bien, hace mejores a sus compañeros. Sus dos goles le reivindicaban, y espantaban de golpe los comentarios que ponían en duda si rendiría bien tras sus dos últimas finales.
Cuando Koke y Saúl despertaron se notó su influencia en el control del partido, en la presión. Empujaron a sus compañeros a campo contrario donde no dejaron respirar al Celta hasta el final. Mientras que a Saúl aún le toca afinar puntería (no estuvo fino en dos disparos que realizó desde la frontal), Koke se liberó de ese cartel de «le cuesta empezar la temporadas», gol y asistencia. Veremos si este resurgir tiene continuidad.
En el duelo por la delantera Torres no estuvo fino. Tampoco lo estuvo Gameiro que falló incomprensiblemente a puerta vacía. Muchos le han colgado el cartel de «jacksonmartinesco», pero sigue siendo pronto para evaluar de manera real su rendimiento. Es cierto también que si ese fallo lo hubiese cometido Torres lo mismo habría ya desatada una tormenta en forma de debate.
Ni el virus FIFA, ni el horario premium pudieron con el Atleti. Ahora espera el PSV para examinar si el exorcismo del buen juego se ha completado, o ha sido todo una ilusión. En cualquiera de los dos casos queda mucho trabajo y competición por delante. Los agoreros mientras esperarán en su cueva. Esto acaba de empezar.