El Atleti entró en la competición firme y serio. Haciendo lo que hasta ahora se le complicaba tanto: jugar bien ante un equipo que se encierra. Y no solo por el resultado. Supo contemporizar cada momento, ver las debilidades rivales y solo le faltó cerrar el partido para no darnos los clásicos últimos minutos infartantes. Tres puntos que suben al casillero rojiblanco para afrontar con tranquilidad el partido frente al Bayern en casa. Los alemanes también ganaron, por lo que ese partido parece el momento idóneo para la postulación del Atleti a ser primero de grupo.
Jugaron Gaitán y Gameiro de inicio. El primero hizo un partido intermitente, a fogonazos, pero qué fogonazos. Pausa, tranquilidad, aceleración y mucha calidad en cada toque. Se espera mucho más de él pero cumplió en los momentos en los que se le exigía. Si consigue acoplarse totalmente al equipo y sentirse importante en la zona de tres cuartos vamos a llevarnos muchas alegrías. El francés por su parte jugó de manera notable y sólo le faltó como en los dos últimos partidos el gol. Sin embargo se empiezan a atisbar combinaciones diabólicas con Griezmann. Es cuestión de tiempo que empiecen a entrar. A este delantero no se le ha olvidado marcar en 3 tres meses, seguro que él es el primero que se exige pero la losa de su precio y la ansiedad por cumplir con las expectativas es algo que todo gran delantero debe superar.
Digno de destacar es el partido que hicieron los 3 todocampistas del equipo: Griezmann, Koke y Saúl. Tuvieron una gran presencia en todas las facetas del juego, en la ofensiva, en la defensiva. Sostuvieron a equipo y le dieron aire en aquellos lugares en los que se atascaba. Saúl nos está mal acostumbrando a meter goles espectaculares. Sus goles como Gandalf llegan justo cuando se lo propone, en los momentos más importantes. Su gol es el primero de un español con la camiseta del Atlético de Madrid al PSV. Sirvió para conseguir derrotar a los holandeses en su feudo, algo que no ocurrió en la Champions del año pasado.
El partido era importante, pero también dejó un pedacito de historia. Juanfran igualaba con 35 partidos a Raúl García como los jugadores que más partidos de Champions han disputado con el Atlético de Madrid. El Rayo de Crevillente no está del todo afinado en este inicio de temporada, pero seguro que irá subiendo el nivel conforme la temporada lo exija.
Y cómo no, el Atleti volvió a dejar la portería a cero. Tercer partido consecutivo, gracias al penalti parado por Oblak. Cuestionado en las tandas de penaltis se resarce en pleno partido para demostrar que también domina esa faceta del juego. Importantísima su actuación para el resultado de anoche.
Ahora vuelve la Liga y hay que mantener la senda de la victoria. Esperemos que los 113 kilómetros recorridos por el equipo no pasen factura el sábado ante el Sporting. El Atleti no se ha desviado de su idea de juego a pesar de las dificultades, ha perseverado y mantenido el rumbo para lograr la victoria. Insistir para estar ahí. Con trabajo todo llegará.