El Atlético Femenino ganó un encuentro prácticamente sentenciado gracias a los tantos de Sheila García y Boe Risa, pero que el Alavés apretó en los últimos instantes del duelo de Copa.
El Atlético de Madrid Femenino salió en la Copa de la Reina con un once que mezclaba habituales del once titular y jugadoras más revulsivas, y una ex del Deportivo Alavés en la portería, Larqué. Por si las moscas, en el banquillo Manolo Cano guardaba todo el arsenal.
Las vigentes campeonas, acompañadas por la Peña Las Colchoneras en las gradas, comenzaron el duelo dominando ligeramente la posesión de balón, casi siempre en campo contrario. Pronto este ligero dominio traería sus frutos debido a un auténtico golazo en el minuto de Sheila García, que había salido formando parte del tridente de arriba. La española aprovechó un error de la guardameta local y casi desde el centro del campo inauguraba el electrónico en Vitoria. Era su primer tanto de la temporada.
Tuvo más ocasiones para incrementar la diferencia las rojiblancas, con un remate con el interior en el ecuador del primer tiempo. Pero sería Boe Risa, tras un centro templado a la frontal del área pequeña de Cardona, consiguió empalar con la zurda el esférico que terminó introduciéndose en la portería tras golpear en el travesaño para aumentar la diferencia.
Innumerables ocasiones sin sentenciar
A la media hora de partido se produciría una traca de ocasiones. Pese a los incontables disparos a puerta, las rojiblancas no pudieron poner más tierra de por medio. Tras un saque de esquina botado por Banini, Xenia remató con la testa como pudo, se envenenó, dio en el larguero en dos ocasiones y tras un barullo de remates, Cardona voleó, dio en el palo izquierdo, el esférico volvió a llegar a Banini, y con un disparo lejano pegó el balón en poste derecho.
El Atlético de Madrid quería ir a por más goles, porque nunca se sabe cuando las tornas pueden cambiar, de hecho, el Alavés estuvo a punto de marcar con un pase de la muerte que no llegó a contactar con una delantera babazorra. Marta Cardona trató de completar su particular gran primera parte para poner el 3-0 con un disparo a bocajarro, pero la ocasión fue desbaratada por la guardameta local Xin, y con ello se llegó al descanso.
De tanto perdonar…
Ya en la segunda mitad, el ritmo del partido se ralentizó. Si que se atacaba, por parte de los dos equipos, pero había más imprecisiones en cada ataque, especialmente en el lado colchonero que era quien más proponía en facetas ofensivas. Gaby García tuvo una de las ocasiones más claras, después de varios acercamientos, con un remate de cabeza que atrapó la guardameta albiazul. Wifi se marchó dos minutos después para dar entrada a Ludmila da Silva.
Una gran ocasión para que la brasileña coja confianza y también, ya que está, para sentenciar el encuentro con ese punto extra de velocidad que tanto la caracteriza. Un detalle que se iba convirtiendo en necesidad a medida que no acababan de entrar las ocasiones, ya que a Sara Carrillo faltaron escasos centímetros para recortar distancias con un remate en plancha. Además, el Deportivo Alavés se fue viniendo arriba a medida que iban pasando los minutos y que podía hacer daño a todo un Atlético de Madrid. En los compases finales del encuentro, Cano dio entrada a jugadoras como Sonia Majarín, Alexia Fernández y Ajibade, y pese a los intentos por hacer el tercero, Sara Carrillo hacía el 1-2 en el 90′ y metió el miedo en el cuerpo al cuadro visitante.
El Atlético Femenino aguantó las embestidas del Alavés y terminó clasificándose a cuartos de final de la Copa de la Reina.