Intratable. Inagotable. Invicto. Se acaban los calificativos para un Atlético B que ha vuelto a ganar, esta vez ante el Galapagar, para seguir más líder. Eso sí, con Giuliano a lo suyo, con dos goles más a la cazuela.
La actitud y el trabajo de los pupilos de García Tevenet está siendo de sobresaliente alto, y así continúa por el momento. Y es que en el partido 17 de la temporada, el Atlético de Madrid B volvió a hacer lo que acostumbre, esta vez ante el Galapagar y con Giuliano Simeone intratable. Todo en un inicio muy disputado, con los aurinegros plantando cara y con dos ocasiones claras que obligaron a Gomis a intervenir. Acciones de peligro por ambos conjuntos y es que respondía el filial por medio de Jordi y Carlos Martín. Ambos hacían trabajar a Gonzalo, que mantenía el empate a cero en el Cerro del Espino. Sin embargo, pasada la media hora de juego el Atlético B empezó a carburar la maquinaria de un líder que se está convirtiendo en intratable.
A partir de ahí, todo cambió tras una jugada elaborada que Camus puso al corazón del área, prolongó Jordi y Giuliano Simeone, como de costumbre, picó para hacer el primero. Increíble trabajo del filial y perfecto remate de un Giuliano que se convertía, momentáneamente, en el pichichi de la competición. Y tras el gol, continuó percutiendo el filial con otro centro de Camus, que remató Jordi de espuela y atajó Gonzalo. Respondió Héctor por medio del Galapagar, que se topó con Gomis, justo antes de Giuliano se la guisase robando ante Pont, para acabar recibiendo falta en el interior del área. Pena máxima a favor del filial colchonero que por medio de Simeone ponía el 2-0 antes del descanso.
En el segundo tiempo el Galapagar buscó recortar distancias ante una férrea defensa colchonera. Con acciones de menor peligro que las vistas en el primer tiempo, el Atlético B controlaba el partido y el marcador, y trabajaba en post de quedarse con los tres puntos. Se controló bien el encuentro pero en el descuento y desde los once metros, el Galapagar recortó distancias. Se volcó así el conjunto aurinegro, en busca de un empate que parecía imposible y así fue, ya que Miguélez, justo antes del pitido final, puso el 3-1 final en un contragolpe perfecto.
Tres puntos de categoría y merecidos para un Atlético de Madrid B que aún no conoce la derrota en lo que va de temporada. El próximo objetivo, el Tres Cantos fuera de casa.