CRÓNICA. Sufrida remontada para certificarse en el liderato

El Atlético de Madrid ha logrado la victoria por dos goles a uno ante el Athletic Club en el encuentro aplazado de La Liga correspondiente a la jornada 18. Tras este partido, el Atlético de Madrid ya cuenta con los mismos encuentros que sus dos principales perseguidores. Ahora, la ventaja en el liderato es de seis por encima del Barcelona y ocho sobre el Real Madrid. 

El Atlético de Madrid repitió el mismo inicio que en el derbi ante el Athletic Club. El conjunto de Simeone comenzó a robar balones en campo rival y, a través de la posesión domino los primeros compases del partido. A pesar de estar mejor que su rival, los rojiblancos no lograron generar peligro real sobre la portería de Unai Simón.

Marcelino introdujo varios cambios tácticos para que su equipo comenzará a tener la posesión y su plan surgió efecto. El equipo vasco adelantó la posesión y, entre un gran Williams que dio una la pausa necesaria a su equipo y Álex Berenguer que dominó el medio del campo, el Athletic se hizo dueño y señor del encuentro. Al igual que el Atlético, a pesar del domino, el Bilbao no lograba generar peligro real sobre la portería de Oblak. En una jugada aislada llegó el primer tanto del encuentro. Williams cazó un balón al espacio y puso el balón atrás para que Muniain, uno de los futbolistas más activos del primer tiempo, logrará batir a Oblak con fortuna ya que su disparo salió muy mordido. 

En los minutos finales del primer periodo, el Atlético mejoró. Esto se tradujo en ocasiones sobre la portería de Unai Simón. En la primera de ellas, Carrasco se deshizo de dos rivales y estrelló su remate en el portero. En la segunda, los rojiblancos lograron el empate justo antes del descanso. Lemar llegó a línea de fondo y puso un centro preciso que Marcos Llorente mandó al fondo de la red con fortuna ya que su cabezazo rebotó en la espalda de un defensor. Con empate a uno en el electrónico del Metropolitano se llegó al descanso.

Trabajo, trabajo y más trabajo

La segunda parte entre el Atlético de Madrid y el Athletic Club comenzó con un penalti a favor de los colchoneros. En una de las primeras jugadas del segundo periodo, Luis Suárez se internó en el área, recortó y fue derribado. El propio uruguayo fue el encargado de transformar el penalti y sumar su gol número 17 en La Liga. A pesar del gol, el Atlético siguió buscando la portería de Unai Simón para sentenciar el partido y no sufrir en el tramo final. Carrasco fue el hombre más peligroso del conjunto de Simeone en la zona de ataque. El belga lo intentó en varias ocasiones sin lograr poner en serios apuros a Unai Simón. En las botas del belga estuvo la ocasión más clara de la segunda parte. Suárez dejó solo a Carrasco con un centró pero el belga se equivocó al intentar controlar el balón y no rematar de primeras.

En el tramo final, el Atlético continuó intentando sentenciar el partido. El equipo de Simeone gozó de varias ocasiones claras para anotar el tercero. Sin embargo, todas tenían el mismo final: Las manos de Unai Simón. El paso de los minutos hizo que el Athletic se volcará sobre la portería de Oblak. A pesar de ello, el Atlético no sufrió, a excepción de un remate de Berenguer que atrapó el guardameta esloveno, y logró llevarse tres puntos clave en la pelea por La Liga.

Tres puntos de oro para un Atlético que sigue más líder consiguiendo sumar cuando sus rivales directos no lo hacen. Ahora, toca seguir partido a partido. Toca pensar en el Getafe.