Foto: Gonzalo Arroyo Moreno/Getty Images
Después de vencer sobre la bocina en casa del Celta de Vigo, el Atlético de Madrid regresaba al estadio Metropolitano para enfrentarse al eterno rival, el Real Madrid, en el primer gran derbi de la temporada.
Los de Diego Pablo Simeone formaron de la siguiente manera: Oblak; Molina, Le Normand, Giménez, Reinildo; Llorente, De Paul, Gallagher; Griezmann, Sørloth, Julián Álvarez. Koke, que jugó casi todo el partido ante el Celta, fue suplente sustituido por De Paul que salió como revulsivo en Vigo.
En el primer tiempo se vio a dos equipos con miedo a fallar, tratando de circular la pelota sobre seguro y cometiendo muy pocos errores atrás. Tanto Julián como Lino tuvieron ocasiones para empezar por delante en el marcador, pero no pudieron hacer mella en la portería rival. Por su parte, Sørloth no tuvo su día pues prácticamente cada pelota que tocaba acababa en pérdida, e incluso su toma de decisiones fue demasiado errática en un partido de tanta exigencia y nivel como acostumbra a ser un derbi.
Ya comenzada la segunda mitad, empezó la polémica con una inexistente falta cobrada al rival tras un piscinazo del ‘7’ visitante. De esa acción surgió el gol del rival, donde se inició otro episodio más de rivalidad acérrima entre ambos conjuntos. Una vez reanudado el encuentro, Simeone realizó cambios introduciendo a Lino por Sørloth, Correa por Gallagher, Riquelme por Julián Álvarez y Javi Galán por Reinildo. Ese último cambio fue muy criticado puesto que el lateral izquierdo no había obtenido minutos aún esta campaña pero, como suele suceder, Simeone volvió a demostrar por qué es uno de los mejores entrenadores del mundo.
En el tramo final del descuento, Galán envió un pase milimétrico para un Correa que, después de aprovechar un error grosero de Rudiger en la marca, regateó al portero rival «en una baldosa» y puso el empate definitivo haciendo que el Metropolitano explote de alegría por el punto obtenido y, sobre todo, por la forma en que se consiguió y lo sucedido previamente. Llorente fue expulsado por una durísima entrada a Fran García que, en primera instancia, el colegiado amonestó con tarjeta amarilla. El rival terminó defendiendo con hasta 6 defensores en su área y así concluyó un nuevo derbi en el Metropolitano.
Con este empate, el Atlético de Madrid se mantiene momentáneamente en la 3º posición de LaLiga con 16 puntos (a falta de que el Villarreal dispute su partido) tras 4 victorias y 4 empates. Próxima parada: Benfica en Lisboa por la Champions League.
