CRÓNICA. Pese a todo, empate que sabe a poco

El Atleti Femenino se lleva un empate muy trabajado en el derbi de la capital ante el Real Madrid. Pese a una muy buena primera parte de las locales, las lesiones marcaron el devenir del partido y supieron sufrir en la segunda mitad de esta jornada de la Liga F.

2500 aficionados rojiblancos llenaron las gradas el estadio principal de la Ciudad Deportiva de Alcalá de Henares en una agradable tarde de domingo para vivir uno de los partidos más esperados de la temporada. Los primeros compases del partido se mantuvieron muy igualados, con algún que otro acercamiento pero sin producir apenas peligro. Al cumplirse el primer cuarto de hora de encuentro, el Atlético Femenino comenzó a venirse arriba. Primero un intentó de control de Maitane tras una falta indirecta, se envenenó y se topó con el travesaño de la portería de Misa. Sería la primera clara para, dos minutos después, Banini volver a intentarlo con un disparo desde fuera del área que despejó la guardameta blanca.

El dominio rojiblanco siguió latente en los minutos posteriores pese al susto blanco por un mal despeje de Lola Gallardo. El duelo se igualó a medida que avanzaba la contienda. Sin embargo, Ajibade recuperó en mitad de campo, vio el desmarque de Ludmila que buscó definir, pero aguantó demasiado. Todo en una acción en la que quedó tocada. Todo para, en la siguiente acción, terminar de romperse. Se marchó sustituida por Eva Navarro tras ser trasladada en camilla, recibiendo la ovación del público. Y así se llegaría al descanso con un Atleti Femenino que se mostró muy superior al Real Madrid.

Empate pese a las adversidades

En la reanudación, el Atlético de Madrid salió con ganas, apretando arriba para adelantarse en el electrónico. La suerte volvió a darle la espalda a las rojiblancas. Marta Cardona, a los pocos minutos de la reanudación, cayó lesionada y se marcho por la goleadora de la Copa Bárbara Latorre. El cuadro blanco lo intentaba desde fuera del área en varias ocasiones, en una de ellas, obligó a Lola Gallardo a atajar el esférico con una soberbia palomita. Más de lo mismo el área contraria, Ajibade condujo el esférico en torno a la hora de partido, disparó desde fuera del área, rechazó en la zaga blanca y Misa tuvo que estirarse para evitar el 1-0.

Comenzaba a masticarse el final del partido, la tensión aumentaba y Athenea tuvo la mayor ocasión para las visitantes con un disparo prácticamente a bocajarro. Pero Lola volvió a lucirse despejando a córner. Manolo Cano dio entrada por Staskova, Santos y Lundkvist para dar frescura al equipo. El Real Madrid comenzó a dominar estos compases finales encerrando al Atlético en su propia área, eso si, sin disparos peligrosos ya que la zaga local hizo el cerrojo. También, todo hay que decirlo, con ayuda de alguna decisión arbitral, en pequeños detalles que pueden decidir un partido. Pero como siempre, el apoyo de la afición presente y la pasión atlética mantuvieron la portería a cero.

Ninguno de los dos equipos fue capaz de terminar de rematar el partido. Así la capital se quedó sin dueño, pero quedó claro quienes formaban parte de la única pasión que habita en ella.