El Atlético de Madrid jugaba en el Benito Villamarín con la baja en defensa de Godín por sanción (uno por ver doble amarilla en el último partido y dos por menosprecio al árbitro), además de los lesionados Juanfran Torres (forzó para llegar al partido del martes y empeoró) y Sime Vrsaljko, del que se desconoce la progresión de su lesión en el ligamento de la rodilla. Los de Simeone llegaban con muchos apercibidos, cuatro en total, y dos de ellos, Giménez y Filipe Luis, vieron una amarilla que les hará perderse la despedida del Vicente Calderón.
En primer lugar el brasileño Filipe Luis veía la segunda amarilla del partido, la primera para el Atleti, tras blocar a un jugador rival sin que el balón estuviese en juego. Una acción que muchas veces se repite en el mundo del fútbol y que hará que el lateral colchonero, muy querido por los aficionados rojiblancos, no pueda despedirse del Vicente Calderón en el último partido oficial. No solo perderse el último partido, sino que esta baja hará que Simeone tenga que volver a jugar al rompecabezas en busca de una nueva solución, algo que probó en ese mismo partido. Decidió retirar al lateral para colocar una línea de tres, algo que acabó quitando tras meter a Thomas que se posicionó en la banda derecha.
No sólo será baja Filipe Luis y es que Giménez, tras golpear el balón con la mano en una acción ofensiva del Atleti vio la amarilla que le hará, al igual que su compañero, perderse la despedida del Calderón desde el verde. El charrúa atacaba un balón y tras un posible empujón golpeó el esférico. Tras señalarse el final de la primera mitad Giménez fue a reclamar de forma sosegada y educada al árbitro que no fue amarilla y explicarle la acción, pero la decisión estaba tomada. Por ello, estos dos pilares no podrán despedirse del Vicente Calderón como se merece, en el campo, y sólo quedan Lucas y Savic como jugadores disponibles.