Pitido final del encuentro en el Vicente Calderón. El Atlético de Madrid hacía sus deberes y vencía al Real Betis por un claro 5-1. Como se anunció en la tarde de ayer y durante los minutos finales del encuentro, “No se mueve nadie”, y así fue. Hasta 30.000 personas se quedaron en el Estadio Vicente Calderón apoyando al equipo de cara al partido del próximo martes frente al FC Barcelona.
Se inició desde los altavoces del Calderón el himno del Atlético de Madrid y fue continuado a capela por los seguidores del club rojiblanco. Con los jugadores ya dentro del vestuario, la afición colchonera pidió que saliesen y estos respondieron. Saltó todo el equipo y recibió el apoyo de sus seguidores. Muchos fueron los canticos hacia los jugadores, pero uno prevaleció, el que gracias a Simeone se ha instaurado en la Ribera del Manzanares, nada más y nada menos que el de “Orgullosos de nuestros jugadores”.
Durante este acto de apoyo a los jugadores, se vivió un momento muy especial para el debutante del día de hoy, Nacho Monsalve. El canterano del Atlético de Madrid se acercó al lateral, donde se encontró con un familiar. El joven jugador es habitual de las pretemporadas rojiblancas y llegó a ir convocado en el último encuentro frente al Sporting, donde no llegó a jugar. Frente al Betis disputó los noventa minutos del encuentro y cuajó un gran partido, en el que apenas cometió errores.