Miguel Ángel Moyá, no pudo terminar el entrenamiento de la tarde hoy tras sentir unas molestias en su muslo izquierdo mientras realizabas unos ejercicios. Tras retirarse del campo de entrenamiento, se le realizaron unas primeras pruebas donde mostraban que el portero balear sufría una lesión muscular en la cara posterior del muslo izquierdo. Tras estás primeras pruebas, el guardameta rojiblanco, en el día de mañana se le realizarán unas pruebas para saber el alcance exacto de la lesión y se observara como evoluciona durante estos días.
Moyá, venía realizando una grandísima temporada supliendo bastante bien a Jan Oblak durante los meses de Dciciembre, Enero y Febrero, donde el portero esloveno estuvo lesionado del hombro. El portero colchonero, había demostrado a toda la afición rojiblanca y al cuerpo técnico, que valía para estar en la portería del Manzanares y defenderla de cualquier modo, luchando por un puesto en ella y lo ha demostrado hasta la fecha. Gracias a esta entrega y gran esfuerzo realizado día a día, llegó la recompensa tanto a la hora de jugar, como a la hora de ampliar su contrato hasta el año 2018 y seguir en la identidad rojiblanca.
Miguel Ángel Moyá, llegó al conjunto de la capital en la temporada 2014-2015, para que junto a Oblak defendiera el feudo de Diego Pablo Simeone. En un principio, el portero titular iba a ser Oblak pero una desafortunada lesión le tuvo apartado durante muchos meses del terreno de juego hasta los Octavos de Final de la Champions, donde salió al campo tras lesionarse Moyá. Hasta ese momento, Moyá era el portero titular del Atlético de Madrid, en un principio se dudaba de su rendimiento pero poco a poco, partido a partido, fue callando bocas y demostrando que es un gran portero y que vale para estar en este Atleti de Diego Pablo Simeone y así lo ha ido demostrando durante estas temporadas.