Algunos físicos teóricos sostienen en base a la teoría de cuerdas que existen varias versiones de una misma realidad. Conforme a esta teoría puede que exista una dimensión en la que Messi no habría aterrizado en la Tierra, o en el que habría elegido jugar de rojiblanco. Es posible que en una de esas realidades paralelas, el Atleti no fuera una montaña rusa de emociones. Esa realidad sin duda será más aburrida pero más sana para nuestros corazones. Lo que nos toca vivir es la dictadura del mejor jugador de todos los tiempos y un Atleti que vive instalado permanentemente en el histrionismo que la prensa de la biliga ha generado en gran parte de la afición. Un día nada sirve, al siguiente es la mejor plantilla de nuestra historia.
Llega pues el segundo examen serio en una de las semanas más difíciles de la temporada. Este miércoles el Barça y el siguiente el Bayern. Ahí es nada. Al menos llega en un momento de crecimiento del equipo. Costó encontrar la puntería perdida ante los recién ascendidos, pero ante Celta y Sporting el equipo se desmelenó. Como agua de mayo llegaron los goles y el buen juego. La base del equipo vuelve a estar a pleno rendimiento y los fichajes entrando en una buena dinámica. Gameiro va mostrando poco a poco las razones por las que se le fichó y Gaitán y Vrsaljko van acoplándose. Parece un momento idóneo para este partido, pero sólo lo parece porque nunca es un buen momento para enfrentarse a la mejor delantera del mundo. En otra realidad puede que la MSN llegue lesionada al partido. Soñar es gratis.
El Atleti planteará un partido menos ofensivo que frente al Sporting pero con Koke, Saúl, Carrasco, Gameiro y Griezmann es un poco temerario decir que jugará sólo a defender, pero eso no se le ha olvidado tampoco. Oblak solo ha recibido un gol en cuatro partidos y Godín y compañía sólo han concedido 1 tiro a puerta por partido. El desafío es mantener la puerta vacía y así tener la oportunidad de hacer daño a la contra. Mismos argumentos que en temporadas anteriores, misma batalla, pero una situación distinta. También algunos de los jugadores siendo los mismos son distintos. En el bando rojiblanco el crecimiento de Griezmann está siendo tan espectacular que la misma prensa que intenta colocarle en otros equipos señala que se acerca para sentarse en la mesa de los grandes. Los medios franceses le sitúan como candidato a finalista del Balón de Oro. El Principito aspira a convertirse en rey.
En el Barça aún tienen en la memoria la eliminatoria de Champions de hace unos meses. Quieren vengarse, demostrar que fue un accidente, que sólo estaban en un momento bajo de forma. No quieren, al igual que los rojiblancos, perder la estela del Madrid. Estos puntos son los que se echan en falta al final de temporada cuando llegan los empates y el goalaverage particular se convierte en determinante. Llegan en un buen momento a pesar del pinchazo ante el Alavés. Tienen la plantilla más profunda que se les recuerda. Han gastado más de 100 millones en suplentes. Una locura. No sé si la Liga es la mejor del mundo pero desde luego es la que más desproporcionada está. En una realidad justa puede que esas cosas no sean viables, o imaginables.
El horario vuelve a ser el mejor posible, el mejor para Tebas claro. Aunque el partido parezca de otro mundo tiene todavía que jugarse en este y eso se le olvida. Un miércoles a las 22:00 de la noche obviamente no es el idóneo para que la gente que trabaja y los niños que tienen cole al día siguiente vaya al campo o se queden hasta tarde viendo el partido.En una realidad paralela es posible que se respete al aficionado. Lo podréis ver por el Partidazo de Movistar y seguirlo por nuestro twitter @atleticosport.