El pasado martes, Diego Pablo Simeone fue expulsado por doble cartulina amarilla tras protestar demasiado a Martínez Munuera. Y además, al salir del verde, aplaudió al colegiado irónicamente. Esto último el árbitro lo interpretó como “menosprecio a los colegiados”.
La expulsión conlleva a un partido de sanción, mientras tanto la RFEF ha decidido castigar al técnico argentino con dos partidos, por lo tanto. el Cholo estará tres partidos viendo como se desarrolla el juego desde el palco. Dichos partidos Diego Pablo Simeone los verá desde la grada en la próxima edición de la Copa de Su Majestad el Rey y podrá sentarse en el banquillo en Liga sin problema alguno. Por suerte, Simeone podrá dirigir a su equipo desde la banda en lo que se pensaba que iban a ser tres partidos sin el argentino en la competición doméstica. A priori no habría ningún problema ya que sobre el papel el Atleti era mejor que sus rivales excepto contra el Valencia que se encuentra en tercera posición pisando los talones al conjunto colchonero.
Pero lo más curioso de este partido fue sin lugar a dudas el cambio de árbitro. Álvaro Hernández se suponía que era el colegiado del encuentro, pero por na lesión muscular tuvo que ser sustituido por Munuera, no podía ser otro, no, tenía que ser Munuera. Un árbitro, que ha perjudicado al Atlético de Madrid sobre todo este curso, donde en tres ocasiones, el arbitraje fue bastante mejorable. El primer partido de liga, Griezmann expulsado con doble amarilla, la primera por “simular” un penalti y la segunda por decir algo que a día de hoy todavía no se sabe pero que el colegiado sin pensárselo dos veces sancionó con una segunda amarilla. Pero sin lugar a dudas el mayor escándalo se produjo el Día de Reyes contra el Getafe. Cada falta normal y corriente que hacían los rojiblancos sacaba amarilla, sin embargo, los azulones paraban los ataques locales con demasiada intensidad, y con esto me refiero a patadas sin ir a por el balón que perfectamente podían haber sido roja, ni siquiera señalaba falta. A parte de esas cartulinas, también expulsó a Diego Costa por celebrar un gol con su afición. En el último encuentro parece ser que no le valía con señalar un penalti inexistente sino que tenía que expulsar a Simeone para poder dormir tranquilo.