El Atlético de Madrid – Rayo Vallecano fue el comienzo de una era en el club rojiblanco. (Palabras escritas a 1 de febrero de 2024, que conste). Arthur Vermeeren culminó su debut con la elástica del Atlético en partido oficial, en un encuentro con cierta trampa tanto por la dinámica del Atlético en este tramo inicial de año, como por lo que venía jugando el equipo de Vallecas en jornadas anteriores.
El internacional belga fue de la partida en una posición que ‘no es la suya’. Entre comillas, con la necesidad de matizar. Si bien Arthur Vermeeren venía jugando y mucho en la posición de pivote, como especialista en la creación de juego, lo cierto es que se puede desenvolver en cualquiera de las posiciones del centro del campo. “No es tan importante jugar en una posición específica, sino lo que me pida el entrenador, jugaré donde me pidan. Si son en varias, me parece bien. Es una de mis virtudes«, afirmaba el centrocampista en su presentación.
A partir de ahí, hay que señalar el contexto, pues está claro que juega rodeado de más compañeros. El centro del campo estuvo formado por Pablo Barrios en la posición de ‘5’, junto a Saúl como interior por izquierda. Hay varias cosas a destacar del debut de Vermeeren: falta de adaptación al esquema táctico (que no en cuanto al sistema en sí), inteligencia en la toma de decisiones y los detalles técnicos en torno a movimientos corporales (control de balón, forma de perfilarse…). Si bien no estuvo muy participativo en el pase (35 toques, 76% de acierto en el pase y 10 pérdidas), supo leer qué demandaba el partido en situaciones concretas y ayudó en defensa pese a no tener un físico privilegiado (2 entradas).
Por el perfil de futbolistas que acompañaron a Vermeeren, y el poco tiempo que lleva en la capital española, no fue fácil su debut pero se le pudieron ver detalle de calidad en cuanto a toma de decisiones, timing y movimientos corporales para recibir y aportar dinamismo a las jugadas. Gestos de crack al que vaticinamos un gran futuro en el Atlético de Madrid.
Simeone, en la rueda de prensa post partido, afirmó que «hay veces que hay que invertir en futbolistas que van a ser importantes en el futuro donde se tiene que encontrar con esta situación nueva, en el Atlético de Madrid hay presión, este estadio, y es un chico que tiene personalidad. Entendíamos que los 45 minutos fueron buenos para encontrarse con la realidad que Vermeeren va a tener de acá para adelante y gestionar de la mejor manera con el tiempo que nos pueda ayudar, que seguramente lo hará». Lo que está claro es que Vermeeren será uno de los grandes baluartes del Atlético de cara al futuro y, conforme dispute más y más minutos de calidad, adoptará un rol cada vez más importante dentro de la plantilla más allá de su debut.